El EI fue expulsado de sus bastiones en Irak y Siria este año y acabó encajonado en un pequeño rincón del desierto que atraviesa la frontera entre ambos países.
La primera ministra británica llegó a Bagdad para visitar por primera vez Irak y hablar con su homólogo iraquí, Haidar al Abadi, de las relaciones bilaterales y el Estado Islámico.
El dinero que se obtenga de la subasta será destinado a la reconstrucción de las comunidades cristianas de Irak devastadas por el grupo extremista Estado Islámico.
Ayer por la noche, un terremoto azotó la frontera entre ambos países y dejó más de 400 muertos y miles de heridos; la SRE expresó su solidaridad con los familiares de las víctimas.
El temblor de magnitud 7.3 que sacudió el domingo los dos países también dejó más de 6 mil heridos; equipos de rescate buscan a decenas de personas atrapadas bajo los escombros.