El problema ha orillado los maestros a sólo recibir en el plantel a menos del 20 por cierto de los alumnos, y sólo por un par de horas para revisar actividades.
El gobernador de Nuevo León dijo que hay “evidencia contundente” que los casos diarios han disminuido aún con el regreso a clases presenciales y el aumento de aforo al 70%.