Ana Paola tiene 16 años y vendió su cabello en redes sociales para apoyar a su abuelito a comprar oxígeno, hace una semana ella y nueve de sus familiares se contagiaron de COVID-19 y los gastos los han rebasado.
Desempeñaba labores en diversas gasolineras en donde le daban alojamiento, hasta que un día enfermó ante los cambios de temperatura, sin embargo, ahora vive alrededor de lo que el denomina “familia”.
El hombre de 74 años recorre las calles de CDMX con un enorme letrero colgado al pecho en el que solicita apoyo para conseguir un empleo como chofer privado o de reparto, ya que su familia depende de él.
Fue el pasado 24 de diciembre cuando don Alfredo esperaba tener algo de dinero para comprar la cena y a su familia, sin embargo una persona actuó de mala fe.