La firma estadunidense, que operaba en Rusia por intermedio de un socio licenciado, continuará pagando el salario de los 2 mil empleados que trabajan en sus tiendas durante seis meses.
Por el momento se desconoce si la causa de la insolvencia son las millonarias multas impuestas por las autoridades rusas a Google por su negativa a eliminar contenido considerado ilegal en Rusia.