Una alimentación basada en el consumo de plantas se asocia con mejor bienestar psicológico y reducción de factores de riesgo para la diabetes tipo 2, a la que se atribuyen casi el 15 por ciento de muertes mundiales.
Investigadores analizaron la incidencia que la gente que consumía regularmente carne bien cocida o hecha a las brasas y encontraron mayor riesgo de padecer diabetes tipo 2.