Al principio solamente era la falta de tapa, pero las constantes caídas de coches provocaron que se fuera deteriorando el pavimento alrededor, hasta volverlo una trampa mortal.
Es sobre la avenida Colón, entre Álvaro Obregón y Platón Sánchez donde el registro, perteneciente a la Comisión Federal de Electricidad permanece abierto desde hace meses.
Las maniobras de rescate duraron alrededor de 20 minutos y, una vez extraída, fue atendida y trasladada a un hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social.
En tan solo una calle Ernesto ha detectado tres registros sin tapa, lo que provoca un riesgo para su integridad y un impedimento para el derecho a la movilidad.
A decir de empleados de negocios aledaños, la tapa se habría vencido y cayó al fondo de la alcantarilla de aproximadamente cuatro metros de profundidad.