Luego de que el presidente Joe Biden retirara los planes para terminar el muro fronterizo de Donald Trump, el gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció que él sí destinará una partida para dicho proyecto dentro de los límites del estado que lidera.
Sin embargo, el mandatario ordenó al Departamento de Comercio hacer una revisión de esas y otras aplicaciones que puedan representar un riesgo para la seguridad nacional.
Los especuladores se apresuran a comprar unidades en los edificios Trump, donde caen los precios a niveles inéditos, un fenómeno que los inmobiliarios atribuyen a la hostilidad hacia el expresidente.
Biden puso fin a la política de asilo “Quédate en México”, impuesta por Trump, y que consistía en enviar a México a los migrantes que solicitaban asilo a EU.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, señaló que mantener la política intacta o modificarla “sería un mal uso de los recursos del departamento”.
La decisión original de Washington de renunciar al pacto fue tomada el año pasado por el gobierno del presidente Donald Trump, pero Moscú esperaba que su sucesor Joe Biden la revirtiera.
Vecinos denunciaron la construcción de un muro en la reserva ecológica de Sierra de Guadalupe, el cual ha provocado problemas de inseguridad en la zona, debido al difícil el acceso de las unidades de emergencia.