Aunque se trate de una vía pública, los franeleros ponen botes o tabiques afuera de sus casas para apartar lugares, aseguraron los miembros del PAN en la Ciudad de México.
Mientras en algunas zonas se erigen grandes edificios habitacionales, las familias que tienen décadas de vivir en el centro se ven obligadas a huir o encerrarse.
Una de ellas es las ‘casa de Aramberri’ y la segunda es la ‘casa de los tubos’, donde ocurrieron tragedias que marcaron a familias y a quienes conocieron su historia.
Las personas migrantes empezaron a tender cobertores que ataron a palos para formar techos; en el piso pusieron otras cobijas y también colocaron casas de campaña.