Según la indagatoria, el sentenciado, de nombre Santiago, de 42 años de edad, cometió los ilícitos contra su víctima entre los años 2020 y 2022 en Nuevo León.
Karla Cortés ha enfrentado meses de revictimización tras denunciar abuso sexual y laboral. Pese a acudir a instituciones como la FGE y la CDH su búsqueda de justicia ha sido bloqueada por la falta de apoyo de su entorno laboral y sindical.
Tras las pruebas presentadas, donde se confirmó el abuso sexual de una menor de cuatro años por parte de su padre, el juez descalificó la prueba y dejó libre al sujeto.