La vacuna contra el COVID-19 desarrollada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford parece no proteger de casos leves y moderados de la enfermedad causada por la variante sudafricana del coronavirus.
Francia, Alemania, Italia y Austria también han impuesto restricciones ante la falta de datos sobre el uso de la vacuna recientemente aprobada en personas de edad avanzada.
Sarah Gilbert, co-desarrolladora de la vacuna, afirmó que, aunque la vacuna tenía eficacia contra la variante de Reino Unido, era posible que debiera adaptarse para una variante futura.
La aplicación del biológico es gratuita y solo se aplica de acuerdo a la Política Nacional de Vacunación contra el Virus SARSCoV-2, para la prevención de la COVID-19 en México.
La investigación también podría acercar a los científicos a la respuesta de una de las grandes interrogantes de la pandemia: ¿las vacunas realmente pueden frenar la propagación del coronavirus?