Las tensiones entre Washington y Teherán han ido aumentando desde 2018, cuando el presidente Donald Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán.
Entre las víctimas del avión siniestrado se encontraban 57 ciudadanos canadienses, así como 11 ucranianos, 17 suecos, cuatro afganos y cuatro británicos.
Trudeau indicó que todavía espera que Irán compense a las familias, pero dijo que por ahora necesitan apoyo para los funerales, viajar a Irán y pagar las cuentas.