La alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, decretó el toque de queda y entró en vigor entre las "23:00 del domingo hasta las 06:00 del lunes"; sin embargo, a pesar del anuncio los manifestantes continuaron.
Desde Mineápolis hasta otras importantes ciudades como Nueva York, Atlanta y Washington, los manifestantes se enfrentaron con la policía el viernes por la noche en una ola creciente de ira por el tratamiento de las minorías por parte de la policía.
La cuenta editorial del Washington Post ha informado que los mayores riesgos de infección del coronavirus vienen de los “contactos sostenidos y cercanos” y “no de las interacciones casuales y cortas”.