El cuerpo que presentó aparentes signos de violencia, se encontraba abandonado detrás del edificio número 92 ubicado muy cerca de donde vivía la víctima.
Un usuario denunció que la llegar a la terminal de Tulpetlac en Ecatepec, la puerta de abrió y por alrededor de cinco estaciones la unidad de Mexibús siguió su marcha.
Esta ceremonia fue organizada por la Diócesis de Ecatepec para pedir por el eterno descanso del difunto, dichos restos fueron depositados en la zona de criptas del recinto religioso.