El avión trataba de aterrizar cuando se estrelló en el aeropuerto de Almati, la mayor ciudad de Kazajistán. El avión viajaba desde la capital, Nur-Sultán, con seis tripulantes a bordo.
Con un rodillo extendido, pintaron un costado de un Boeing 777 de la aerolínea Air France, que estaba estacionado sin pasajeros, y luego subieron a la aeronave.
La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos ordenó que United Airlines aumentara las inspecciones del avión luego de que uno de sus vuelos tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Denver.
El avión se estrelló cuando regresaba al aeropuerto de Abuya después de haber detectado un fallo de motor; tenía como misión supervisar la zona para el rescate de personas secuestradas.