Un 93 por ciento de las 5 mil personas encuestadas por WWF en marzo en tres países del sudeste asiático, así como en Hong Kong y Japón, dijeron que los mercados no regulados que venden vida silvestre debían cerrarse para evitar futuras pandemias.
Una vez que se frene la propagación de la infección, el Gobierno tiene previsto fomentar el consumo, el turismo y la celebración de diferentes actividades y actos.