El informe fue elaborado por los Institutos de Relaciones Internacionales Contemporáneas de China (CICIR), un grupo de expertos del Ministerio de Seguridad del Estado, el principal órgano de inteligencia de China.
La declaratoria obligaría a la OMS apoyar a China en diversos requerimientos, y por ahora Pekín no ha solicitado dinero, sino insumos de alimentos y de medicinas, así como mayor trasferencia tecnológica.