En redes sociales se dio a conocer un nuevo caso de abuso policial en Tulum, ahora cometido en contra de un joven, solo uno días después del asesinato de Victoria Esperanza Salazar a manos de policías.
El arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar, indicó que la muerte de Victoria Salazar debe mover a los gobiernos de México, El Salvador y Estados Unidos a defender y respetar "los derechos de los migrantes".
La mujer quien fue asesinada a manos de policías municipales en Tulum, Quintana Roo, México, fue sepultada en la ciudad salvadoreña de Sonsonate, en presencia de su familia y amigos.
Por la mañana se llevó a cabo el traslado aéreo del cuerpo de Victoria, así como sus hijas menores de edad, quienes regresaron a El Salvador junto con su abuela.
El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, ha dado seguimiento puntual al caso y al proceso de repatriación, por lo que exigió que se haga justicia y se castigue a los responsables del asesinato.
A través de una llamada telefónica, la secretaria de Gobernación refrendó el compromiso de la Federación para resolver el caso de la mujer salvadoreña.
Víctor Mas Tah afirmó que su administración ha seguido las recomendaciones emitidas por el Centro Estatal de Derechos Humanos respecto a abusos policiales.
