La senadora por California es la mujer que ocupará el más alto cargo ejecutivo hasta ahora de Estados Unidos, cuatro años después de que Trump derrotó a Hillary Clinton.
Las tasas de aprobación de Trump son peligrosamente bajas para un presidente, pero está muy vivo en el recuerdo de Biden y los demócratas la campaña de 2016, cuando Trump revirtió sorpresivamente las tendencias en octubre y venció a Hillary Clinton.