Algunos señalan que este ojo de agua solía ser un banco de arena que poco a poco se fue llenando de agua hasta convertirse en el ojo de agua que es hoy.
Los afectados indicaron que habían salido de su casa a dar una vuelta con su perra cuando al regresar no se percataron de que habían dejado la puerta abierta.
Los hechos ocurrieron en el templo cristiano Centro de Fe y Esperanza y Amor, en donde un hombre abrió fuego contra una persona que se encontraba al interior del lugar.