Personas con discapacidad visual en Puebla exigen mejoras en las calles del Centro Histórico
Las calles de Puebla necesitan varias mejoras para ser incluyentes con personas débiles visuales
Las calles del Centro Histórico se han convertido en un riesgo para las personas con discapacidad visual debido a la falta de infraestructura que les permita orientarse al caminar. Ante esta situación, han exigido a las autoridades una mayor inversión en la creación de espacios que consideren sus necesidades.
MULTIMEDIOS Puebla realizó un recorrido por el primer cuadro de la ciudad y constató que hay calles donde no existen líneas guía para personas ciegas, y aquellas que sí las tienen, se encuentran en malas condiciones. Muchos carriles de bastones para ciegos presentan roturas, interrumpiendo la continuidad de los mismos y poniendo en peligro la seguridad de quienes los utilizan.
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Además, se observó que las placas en braille colocadas en los muros para indicar el nombre de las calles están desgastadas, lo que dificulta su uso por parte de los usuarios.
Uno de los puntos alarmantes es la presencia de tapas de registros de agua o electricidad que obstaculizan las líneas guía para personas invidentes, como ocurre en la calle 4 Poniente a la altura de la 3 Sur. Esto impide un tránsito seguro para quienes las utilizan.
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Exigen mejora en las calles
Guillermo Núñez, una persona con discapacidad visual de Puebla, cuestionó las acciones de las autoridades para crear espacios seguros para quienes padecen esta discapacidad. Reconoció que las calles del Centro Histórico representan un riesgo, ya que él mismo ha sufrido caídas debido a las malas condiciones en las que se encuentran.
Del mismo modo, Daniel, quien a causa de su discapacidad no encuentra oportunidades laborales y depende de la mendicidad para subsistir, recorre a diario las calles del primer cuadro de la ciudad, a pesar de que gran parte de ellas no están adaptadas para facilitar su movilidad.
"Aprendí a desarrollar mis otros sentidos, como el tacto, el olfato, el oído y el sentido de la orientación. Así, mi cerebro trabaja y puedo caminar. Utilizo un bastón de rastreo para seguir las líneas de las aceras", afirmó.
ERV
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