A tres años de la muerte de María Fernanda y Alejandro Castro, su familia continúa pidiendo justica contra Joao Maleck

El 23 de junio de 2019, María Fernanda Peña Álvarez-Ugena y Alejandro Castro murieron en un accidente automovilístico en el cruce de la avenida Tepeyac y la calle Playa de Hornos en Zapopan.

Las cámaras de seguridad captaron el momento del accidente, donde se puede observar como un automóvil se impacta en la parte trasera del otro vehículo, lo que provoca que este pierda el control y choque contra un árbol, posteriormente gira un par de veces hasta detenerse.

Minutos después se mencionó que el futbolista Joao Maleck fue quien provocó el fatal accidente donde murieron María Fernanda Peña Álvarez-Ugena y Alejandro Castro, quienes se habían casado por la iglesia un día antes.

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Joao Maleck fue detenido el mismo día y se le dictó prisión preventiva el 25 de junio. Tras más de un año internado en el penal de Puente Grande, el futbolista fue sentenciado el 9 de noviembre de 2020 a tres años ocho meses y 15 días, por homicidio culposo y daño a las cosas.

Sin embargo; de acuerdo con Anuar García, representante legal de la familia, la sentencia favoreció a Joao Maleck porque no se tomó en cuenta la agravante de alcoholemia, sólo la de exceso de velocidad, lo que derivó a que se juzgara al futbolista bajo culpa leve en vez de grave.

El 15 de diciembre de 2020, cuatro años después de ser sentenciado, el futbolista salió bajo fianza y con la condicionante de reparar el daño a los dos hijos de Alejandro Castro, la cual ascendió a más de tres millones de pesos.

Pero ante la inconformidad de la sentencia, la familia interpuso múltiples amparos ante instancias estatales y federales para apelar la pena. Fue así, que el 4 de noviembre de 2021 se realizó una audiencia ante el Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco, donde la defensa legal de la familia de María Fernanda solicitó a los magistrados aumentar la pena de tres años ocho meses y 15 días a ocho años seis meses y 7 días.

Sin embargo, el 5 de noviembre —cinco días después de la audiencia—. el Supremo Tribunal de Justicia dictaminó que la condena para el futbolista no tendría incremento, pero sí la reparación del daño a las tres víctimas indirectas tras la muerte de la pareja: la madre de María Fernanda, la señora Martha Cristina Álvarez-Ugena y los dos hijos de Alejandro Castro.

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La familia seguirá apelando por justicia

A tres años de la muerte de María Fernanda Peña y Alejandro Castro, la familia de las víctimas se aferra a su última esperanza para obtener justicia y que el Tribunal Federal de Amparo considere insuficiente la sentencia al futbolista.

“Esta es la última instancia, se han agotado todos los recursos tanto por la defensa como por la asesoría jurídica”, explicó Anuar García, representante legal de la familia.

El abogado afirmó desconocer cuántos amparos han interpuesto ante tribunales estatales y federales en el transcurso de tres años. No obstante, dijo que en los tribunales locales el proceso no ha sido apegado a derecho.

“Nosotros vimos muchas casualidades para obtener beneficios que no creemos que le correspondan (a Joao Maleck), muchas confusiones porque el delito se llama homicidio a título de culpa grave y luego no valoran la segunda agravante, cosas sospechosas lo pudiéramos llamar”, explicó.

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Anuar García considera que el futbolista fue favorecido por ser una figura pública, ya que “no necesariamente tiene que ver con el tema de la habilidad para sus abogados” el obtener los beneficios que hoy ostenta. Además, enfatizó que no se tomó en cuenta que Joao Maleck conducía a exceso de velocidad bajo el influjo del alcohol.

En 15 días, el Tribunal Federal de Amparo emitirá su resolución y en caso de que no resulte favorable presentaran el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que el futbolista sí privó “de la vida a dos personas” con dos agravantes.

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“Queremos que no haya impunidad”

La tía de María Fernanda, Claudia Álvarez-Ugena, espera que la resolución del Tribunal Federal sea favorable, ya que desea que el caso vuelva a abrirse para aplicar una pena mayor al futbolista, quien el 9 de noviembre fue sentenciado a tres años ocho meses y 15 días, por homicidio culposo y daño a las cosas, condena que califica como una burla.

“Queremos que no haya impunidad, ya basta de tantos casos que han sido impunes, esto debe de parar, no debe de seguir sucediendo. Queremos que marque un precedente y que pueda detener y que nadie más tenga que pasar”, mencionó.

Claudia quería a María Fernanda como una hija y aun después de tres años, le duele que no se haya obtenido justicia por su muerte porque “no es un accidente subirte a conducir un auto sabiendo que estás alcoholizado y menos a una velocidad de 180 kilómetros por hora en una ciudad. No es un accidente, esto es un asesinato”.

Claudia considera que Joao Maleck ha tenido privilegios en el proceso legal porque pese a existir las evidencias de las agravantes, no fueron tomadas en cuenta para una pena justa.

“Parece ser que ser futbolista te otorga el privilegio de quitarle la vida a dos personas o matar a dos personas y salir en libertad”.

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La perspectiva de Joao Maleck

Cuando Joao Maleck salió del penal de Puente de Grande tras obtener su libertad, se le cuestionó si volvería a tomar y sus primeras palabras fueron las siguientes:

“Es obvio que no, salgo siendo un ejemplo para la sociedad, debo ser mejor ejemplo, siendo mucho más responsable y maduro. A cualquiera le pudo pasar, tuve la suerte de que a mí me pasó, me ha dolido muchísimo, me ha costado, pero he mejorado como persona".

Durante la audiencia del pasado 4 noviembre de 2021 en la que se buscaba aumentar su condena de 3 a 8 años, Joao Maleck habló con la voz entrecortada y dijo, “me da mucho sentimiento que la gente piense que no me pesó. Tengo 22 años y no sé de dónde saco fuerza para seguir jugando”.

El futbolista se dijo dispuesto a apoyar a los dos hijos de Alejandro Castro que quedaron huérfanos tras su muerte y mencionó que no quiere regresar a prisión.

"Yo todos los días pienso que me quieren regresar a la cárcel donde estuve y no quiero volver", expresó el futbolista.

Su representante legal, Javier Alberto García González, externó tras terminar la audiencia que la pena de más de tres años sí fue justa ya que hubo pruebas insuficientes que demostraran que Joao manejó en estado de ebriedad y además, no tenía antecedentes criminales

“Creemos que como siempre Junior se quedó, accedió a los exámenes y él siempre dijo yo soy culpable aquí estoy y no hay algún motivo para que el joven en este hecho tan desafortunado le den una culpabilidad mayor”.

MRG