Padres de familia cuestionan a autoridades por falta de recursos en kínder de Juárez

Padres y madres de familia del kínder Inocencio Colunga en Juárez cuestionan fuertemente a las autoridades municipales y estatales, luego de que, tras varios reportes sobre la falta de materiales, servicios y recursos, estos fueran prácticamente ignoradas.

Y es que pese la imagen de menores tomando clase en la intemperie por falta de aulas en buenas condiciones, el municipio respondió enviando solo cuatro baños portátiles, mismo que tendrán que regresar en 15 días, asegura una mamá.

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Además, la Secretaría de Educación les ofreció mandar escalones para que los pequeños ingresen a las aulas móviles y a los baños portátiles, pues las entradas están a una altura no accesible para ello.

Pese a todas las carencias del plantel, los menores arribaron a las 8:30 horas de este miércoles para tomar sus clases de manera positiva.

Una madre de familia indicó que, por dos semanas, los niños estuvieron tomando clases en un jardín de niños cercano, pero fueron retirados debido a que habría sobrepoblación.

Niños toman clases a la intemperie

A la intemperie, así es como toman clases alumnos del kínder Inocencio Colunga Medrano en la colonia Valle de Santa Isabel Sector Cartagena en el municipio de Juárez, Nuevo León.

Padres y madres de familia denunciaron que el plantel se encuentra en pésimas condiciones, pues solo se comprende de cuatro aulas móviles, mismas que tiene goteras, están mal instaladas y también están ladeadas.

Es precisamente a estas condiciones, que las clases apenas empezaron ayer lunes, luego de que el ciclo escolar a nivel nacional diera arranque hace tres semanas.

En el lugar, se puede observar a los pequeños sentados en bancos y mesas, pero afuera de las aulas, en pleno patio y terreno baldío.

Para asentar un poco los salones, tuvieron que improvisar escaleras y soportes con bloques, para que además los niños y el personal docente pudieran ingresar a las aulas que están más o menos en condiciones aceptables, pues la altura que hay entre el suelo y la puerta de entrada es superior al metro.

Los padres han externado su preocupación por la situación, pues entre otras cosas, temen que algún aula se voltee con los niños adentro u ocurra algún evento desagradable.

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