user-icon user-icon
  • Clima
    • León 21ºC 18ºC Min. 33ºC Máx.
    • Rain
    • Próximos 5 días
      • Jueves
      • 17º / 31º
      • Rain
      • Viernes
      • 17º / 30º
      • Rain
      • Sábado
      • 18º / 29º
      • Rain
      • Domingo
      • 19º / 31º
      • Rain
      • Lunes
      • 19º / 29º
      • Rain
    • Pronóstico en video Jessica de Luna nos da el pronóstico del tiempo en el Bajío para este miércoles 21 de mayo de 2025.
    • Jessica de Luna nos da el pronóstico del tiempo en el Bajío para este miércoles 21 de mayo de 2025.
      • Video
      • media-content

“No podemos dejar que la muerte tenga la última palabra": Párroco de San Bartolo clama por justicia tras masacre en San Felipe

El ataque armado fue perpetrado mientras aún se recogían los restos de una celebración religiosa.

Christopher Gómez Guanajuato /

Durante la madrugada del lunes 19 de mayo, alrededor de la 1:40 a.m., siete jóvenes fueron asesinados a balazos en la comunidad de San Bartolo de Berrios, en el municipio de San Felipe, Guanajuato.

El ataque, estremeció no solo a este pequeño poblado, sino a todo el estado de Guanajuato. Los hechos fueron suscitados mientras aún se recogían los restos de una celebración religiosa, y de hecho, dos de las víctimas eran hijos del delegado local. 

El padre José de Jesús Pérez Negrete, párroco de la iglesia Santa María Guadalupe, Reina de los Apóstoles, fue testigo directo de los hechos. 

“Estábamos recogiendo las sillas y los manteles del evento en honor a la Virgen. Ya solo estábamos los servidores cuando empezaron los balazos… Nos tiramos al suelo. Al salir, estaban los papás llorando y el dolor ahí, presente, brutal”, relata con la voz aún estremecida.

El sacerdote lleva casi siete años al frente de esta comunidad y conocía a los jóvenes, como conoce a todos los que caminan por esas calles. Algunos los vio crecer; a otros los conocía por sus padres. 

“Se juntaban aquí en la plaza, platicaban, reían. Eran muchachos buenos, llenos de vida”, dice, con un nudo en la garganta.

La violencia ha golpeado a San Bartolo antes, pero nunca con esta crudeza. A menos de dos meses de otro hecho violento  en la misma comunidad, la herida apenas comenzaba a cerrar… y se volvió a abrir.

“La impotencia es lo primero que se siente. Ver a nuestra gente llorar por sus hijos es una cosa inexplicable. No hay palabras para eso”, expresa el padre José.

El miedo ha paralizado a la comunidad. Las actividades cotidianas se han suspendido, la plaza luce vacía y el aire está cargado de dolor. Sin embargo, desde la fe y la empatía, el párroco lanza un mensaje claro: no debemos acostumbrarnos a esta violencia.

“No podemos dejar que la muerte tenga la última palabra. Hay que seguir luchando por la paz, por la verdad, por la justicia. Cuidémonos mucho. Cuidemos a los hijos, a los hermanos, a todos.”

El sacerdote insiste en que la presencia de los padres en la vida de los jóvenes no faltaba. Al contrario: hoy están ahí, de rodillas, abrazando los recuerdos, intentando encontrar consuelo donde ya no hay respuestas.

“Estamos con ustedes”, les dice, “Dios está con ustedes. No están solos.”

En San Bartolo, donde la vida se vive de frente y el dolor también, queda el eco de una plegaria que no se resigna: que la vida tenga la última palabra.


  • Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de TELEDIARIO; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
  • t-icon