Bolivia entrena, atenta al futuro pero también al TAS 

La selección boliviana de futbol, que se apresta para enfrentar a Perú y Chile en las eliminatorias al Mundial, entrenó el lunes, con plantel casi completo y con una realidad contradictoria. Marcha penúltima y parece haber perdido cualquier aspiración de clasificarse a Rusia, si bien persiste una ligera esperanza de que recupere puntos que le fueron descontados.

Así, tiene un ojo puesto en el futuro y otro en el TAS.

Es posible que sólo una parte del equipo haga el viaje a Lima para medirse el jueves a Perú. Los demás jugadores podrían quedarse en La Paz para recibir a Chile el martes.

El técnico Mauricio Soria anticipó que definirá este martes qué jugadores volarán a Perú un día después. Lo único seguro es que no será de la partida el volante Juan Carlos Arce, pieza clave en la delantera, por acumulación de tarjetas.

Marcelo Martins, delantero del Wuhan Zall de China, fue el único de los convocados que no estuvo en la práctica del lunes en la tarde. Se informó que viajará directamente a Lima.

El centrocampista Jhasmani Campos, del Bangkok Glass tailandes; el delantero Luis Alí, del Ponte Petra brasileño, y el portero Carlos Lampe, del Huachipato de Chile, se sumaron a las practicas bajo la dirección de Soria.

“No será un partido fácil, Perú es un luchador pero hay que jugárselas en Lima para traer los tres puntos”, dijo Lampe a la prensa.

Con apenas 10 puntos en 14 partidos, y cuatro fechas pendientes, Bolivia no tiene posibilidades de clasificar. En estas condiciones, Soria ha hablado de la importancia de incorporar a jugadores jóvenes, como el defensor Luis Haquin y el arquero Rubén Cordano.

Pero en cuestión de días, el TAS debe pronunciarse sobre el recurso que presentó Bolivia, a raíz de que se le quitaron los puntos obtenidos en un triunfo sobre Perú y un empate ante Chile, por determinarse que había alineado indebidamente a un jugador nacido en Paraguay, el zaguero Nelson Cabrera.

Los jugadores y Soria han manifestado que buscan concentrarse en el aspecto futbolístico y olvidarse de la controversia. Pero el entrenador ha reconocido también ante la prensa de su país que está “esperanzado” en recuperar los puntos “que se ganaron en la cancha”.