Las monedas digitales que están conquistando el mercado en 2024

No es un secreto para nadie que el mercado de las criptomonedas sigue siendo un tema candente en 2024. A menudo, esto se debe a la constante evolución de este ecosistema que, por un lado, promete grandes oportunidades, pero, por otro lado, implica ciertos riesgos que los inversores no pueden ignorar.

Una de las razones principales por las que las criptomonedas siguen siendo relevantes es la creciente adopción que están experimentando en distintos sectores. Ahora, además de ser monedas digitales, se han convertido en plataformas tecnológicas capaces de transformar áreas como las finanzas descentralizadas (DeFi) y las aplicaciones descentralizadas (dApps). A esto se suma la creciente aceptación de tecnologías como la cadena de bloques (blockchain), que ha hecho que jueguen un papel cada vez más relevante en la economía global.

Como resultado, criptomonedas como Bitcoin, Ethereum o Solana se han convertido en opciones imprescindibles para quienes buscan diversificar sus inversiones. Pero claro, la gran pregunta sigue siendo: ¿Cuáles son las criptomonedas que realmente podrían despegar este año?

Bitcoin (BTC)

Hablar de criptomonedas y no mencionar a Bitcoin es prácticamente imposible. Y es que desde su creación, la criptomoneda se ha consolidado como la más valiosa del mercado. En 2024, Bitcoin sigue siendo la joya de la corona, con una capitalización de mercado que ronda los 1,03 billones de euros. A lo largo del año, Bitcoin ha mostrado su capacidad para resistir las fluctuaciones del mercado, manteniéndose estable alrededor de los 51,000 € en septiembre.

Lo que hace que Bitcoin sea tan atractivo es su escasez: solo existirán 21 millones de Bitcoins en total. A medida que más personas y grandes inversores institucionales, como Tesla y PayPal, lo adoptan, la demanda sigue creciendo, impulsando su precio.

En abril de este año ocurrió algo que muchos inversores estaban esperando: el halving de Bitcoin. Y aunque a veces se habla de estos eventos como si fueran solo un detalle técnico, la realidad es que tienen un impacto enorme en el mercado.

Si miramos lo que ha pasado antes con los halvings, siempre han venido seguidos de aumentos importantes en el precio, aunque a veces ese efecto no es inmediato. Esta vez no ha sido la excepción. Aunque el impacto no se vio de un día para otro, los inversores que se mantuvieron optimistas ya están empezando a ver el resultado de su paciencia.

Ethereum (ETH)

Ethereum es otro gigante de las criptomonedas. Creada en 2015, Ethereum no solo es una moneda digital, sino una plataforma para desarrollar aplicaciones descentralizadas a través de contratos inteligentes. Su versatilidad ha convertido a Ethereum en una de las criptomonedas más populares, y es comúnmente usada para day trading debido a su volatilidad y movimiento constante en los precios.

Este año, con la actualización a Ethereum 2.0 en marcha, se espera que la red sea más rápida y eficiente, con transacciones más ágiles y tarifas más bajas. Si a eso le sumamos su dominio en el mundo de las finanzas descentralizadas y los NFTs, está claro por qué sigue en el podio de las criptomonedas favoritas.

Litecoin (LTC)

En los últimos meses, Litecoin ha experimentado un aumento en la actividad de compra por parte de grandes inversores, lo que indica un posible repunte en su valor. En septiembre se cotizaba en torno a los 58 €, un salto del 27% respecto a su mínimo de agosto, lo que la convierte en una opción atractiva para aquellos que buscan diversificar su cartera con una criptomoneda más accesible en términos de precio.

Chainlink (LINK)

Lo que hace especial a Chainlink es su capacidad para conectar datos del mundo real con la blockchain a través de oráculos descentralizados, lo que permite que los contratos inteligentes reciban información externa, como los precios de activos o datos meteorológicos. ¿Por qué es importante? Porque expande enormemente las aplicaciones prácticas de la blockchain.

Con su token LINK cotizado a 9,64 € en septiembre, muchos analistas creen que seguirá en ascenso, especialmente a medida que más industrias lo adopten. Para los inversores que buscan apostar por la interconexión entre el mundo digital y el físico, Chainlink representa una excelente opción.

Solana (SOL)

En vista de los desafíos que enfrentan otras redes como Ethereum, Solana ha surgido como una alternativa capaz de procesar miles de transacciones por segundo de manera rápida y a bajo costo. Por este motivo, su popularidad entre los desarrolladores de dApps y plataformas DeFi ha crecido de manera exponencial.

De hecho, en 2024, Solana ha demostrado ser una de las plataformas más eficientes, lo que ha disparado la adopción de su token, SOL. No es de extrañar que muchos vean en Solana una de las opciones más prometedoras dentro del mercado cripto actual.

Cardano (ADA)

Por último, hemos de tener en cuenta que Cardano es una criptomoneda que ha tomado un camino diferente al de sus competidores. Esto implica que su desarrollo ha sido más lento, pero también más metódico, basado en investigación y revisado por pares. Es, precisamente, esta estrategia lo que ha permitido a Cardano consolidarse como una opción segura y escalable.

Las criptomonedas han llegado para quedarse, y quienes logren identificar los proyectos más prometedores podrían estar frente a una mina de oro. Lo más importante, como en cualquier inversión, es informarse bien y diversificar. El mercado es volátil, sí, pero con un análisis cuidadoso y decisiones basadas en datos sólidos, invertir en criptomonedas puede ser una forma emocionante de hacer crecer tu patrimonio.

ZP