FMI y Argentina se encaminan a nuevo acuerdo de deuda  

BUENOS AIRES. - El Gobierno argentino acordó el sábado comenzar consultas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que podrían derivar en un nuevo programa con el organismo financiero, tres días después de que la entidad internacional comandada por Kristalina Georgieva declaró que la deuda pública argentina no era sostenible.

El ministro de Economía argentino Martín Guzmán le dijo a Georgieva, directora gerente del FMI, que Argentina -que actualmente carga una deuda soberana de cerca de 100 mil millones de dólares- desea iniciar las Consultas del Artículo IV del organismo que podrían sentar las bases para un nuevo acuerdo, dijeron ambas partes en comunicados.

El encuentro entre el funcionario argentino y Georgieva se dio en el marco de la reunión de ministros de Finanzas del G-20, en Arabia Saudita.

La apertura de consultas es "un paso valioso que permitirá profundizar el entendimiento mutuo entre el gobierno argentino y las autoridades del FMI en el camino a contar oportunamente con un nuevo programa con el organismo", dijo Guzmán, de acuerdo a un comunicado del Ministerio de Economía argentino.

Una consulta del Artículo IV permitiría al FMI inspeccionar las cuentas de Argentina, antes de que un nuevo acuerdo sea firmado. Esto le daría confianza a acreedores del país sudamericano, que actualmente busca reestructurar una deuda soberana que dice que no puede pagar sin antes generar crecimiento económico.

Argentina mantiene una deuda de 44 mil millones de dólares con el FMI, el principal acreedor del país sudamericano cuyo presidente Alberto Fernández lo busca sacar de una crisis económica que data de hace dos años. El año pasado la inflación anual de Argentina fue superior al 50 por ciento.

Participantes de la reunión del G-20 expresaron alivio de que Argentina había acordado mantenerse comprometido con el FMI, explicando que disminuía el riesgo de un complicado "default".

Georgieva dijo el sábado que había tenido un "intercambio fructífero sobre los desafíos" de Argentina con Guzmán para que el país inicie un crecimiento más sustentable e inclusivo.

"Apoyé al ministro (Guzmán), y el liderazgo del presidente Alberto Fernández, en sus esfuerzos para estabilizar la economía y reducir la pobreza", dijo Georgieva.

El miércoles el FMI dijo que consideraba que la deuda pública de Argentina no es sostenible, por lo que sus acreedores privados deben hacer una "contribución apreciable", en un guiño al Gobierno de Fernández.

"Argentina tiene el potencial para recuperar la estabilidad, pero claramente esta situación de emergencia económica necesita resolverse", dijo Guzmán, que agregó que "sabemos que los marcos no son perfectos y tenemos que mejorarlos y completarlos con la comprensión y la colaboración del mundo entero", según el comunicado.

A su vez, el Gobierno argentino dijo que Guzmán mantuvo reuniones bilaterales con sus pares de Alemania, Francia, Suiza, India y Arabia Saudita durante el congreso del G-20 y que los representantes de estos países expresaron su apoyo a las negociaciones de reestructuración que sostiene Argentina.

cog 

BUENOS AIRES. - El Gobierno argentino acordó el sábado comenzar consultas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que podrían derivar en un nuevo programa con el organismo financiero, tres días después de que la entidad internacional comandada por Kristalina Georgieva declaró que la deuda pública argentina no era sostenible.

El ministro de Economía argentino Martín Guzmán le dijo a Georgieva, directora gerente del FMI, que Argentina -que actualmente carga una deuda soberana de cerca de 100 mil millones de dólares- desea iniciar las Consultas del Artículo IV del organismo que podrían sentar las bases para un nuevo acuerdo, dijeron ambas partes en comunicados.

El encuentro entre el funcionario argentino y Georgieva se dio en el marco de la reunión de ministros de Finanzas del G-20, en Arabia Saudita.

La apertura de consultas es "un paso valioso que permitirá profundizar el entendimiento mutuo entre el gobierno argentino y las autoridades del FMI en el camino a contar oportunamente con un nuevo programa con el organismo", dijo Guzmán, de acuerdo a un comunicado del Ministerio de Economía argentino.

Una consulta del Artículo IV permitiría al FMI inspeccionar las cuentas de Argentina, antes de que un nuevo acuerdo sea firmado. Esto le daría confianza a acreedores del país sudamericano, que actualmente busca reestructurar una deuda soberana que dice que no puede pagar sin antes generar crecimiento económico.

Argentina mantiene una deuda de 44 mil millones de dólares con el FMI, el principal acreedor del país sudamericano cuyo presidente Alberto Fernández lo busca sacar de una crisis económica que data de hace dos años. El año pasado la inflación anual de Argentina fue superior al 50 por ciento.

Participantes de la reunión del G-20 expresaron alivio de que Argentina había acordado mantenerse comprometido con el FMI, explicando que disminuía el riesgo de un complicado "default".

Georgieva dijo el sábado que había tenido un "intercambio fructífero sobre los desafíos" de Argentina con Guzmán para que el país inicie un crecimiento más sustentable e inclusivo.

"Apoyé al ministro (Guzmán), y el liderazgo del presidente Alberto Fernández, en sus esfuerzos para estabilizar la economía y reducir la pobreza", dijo Georgieva.

El miércoles el FMI dijo que consideraba que la deuda pública de Argentina no es sostenible, por lo que sus acreedores privados deben hacer una "contribución apreciable", en un guiño al Gobierno de Fernández.

"Argentina tiene el potencial para recuperar la estabilidad, pero claramente esta situación de emergencia económica necesita resolverse", dijo Guzmán, que agregó que "sabemos que los marcos no son perfectos y tenemos que mejorarlos y completarlos con la comprensión y la colaboración del mundo entero", según el comunicado.

A su vez, el Gobierno argentino dijo que Guzmán mantuvo reuniones bilaterales con sus pares de Alemania, Francia, Suiza, India y Arabia Saudita durante el congreso del G-20 y que los representantes de estos países expresaron su apoyo a las negociaciones de reestructuración que sostiene Argentina.

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