Salida de la Unión Europea domina programa de gobierno británico

Londres, 21 Jun (Notimex).- La reina Isabel II, de 91 años de edad, leyó el programa del recién electo gobierno conservador de minoría que estuvo dominado por la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), conocida como "Brexit".

“La prioridad de mi gobierno es asegurar el mejor acuerdo cuando el país se salga de la Unión Europea”, comenzó el discurso de la reina.

Señaló que los ministros trabajarán para lograr un consenso amplio sobre el futuro de Gran Bretaña fuera de la Unión.

La reina acudió este día al parlamento, sin la pompa y la circunstancia de otras ocasiones, para leer el programa del nuevo gobierno conservador tras las elecciones anticipadas del 8 de junio.

El gobierno de minoría, el primero desde 1978, presentó 14 proyectos de ley y dos borradores que tendrán que ser aprobados durante el recién inaugurado periodo legislativo.

Entre las ocho leyes sobre el Brexit se encuentra la Gran Ley de Derogación para revocar el Acta de Comunidades de 1972 y trasladar las leyes europeas a la jurisdicción nacional.

“Una ley será introducida para repeler el Acta de Comunidades y dar certidumbre a individuos y empresas. Esto será completado con más leyes para que el Brexit sea un éxito”, precisó la monarca.

Entre las prioridades mencionó establecer nuevas políticas nacionales en inmigración, uno de los temas que más preocupa al electorado británico, además de nuevas leyes en agricultura y pesca. La monarca aseguró: “Mi gobierno buscará mantener una relación especial con nuestro socios europeos y forjará nuevas relaciones a lo largo del globo”.

Además, se esperan nuevas legislaciones en temas de comercio y aduanas una vez que el Reino Unido abandone el bloque y se le dará apoyo a las empresas exportadoras británicas para expandir sus operaciones a otras partes del mundo.

En su discurso, la monarca comentó que los reyes de España Letizia y Felipe VI realizarán una visita de Estado en julio, pero no hubo mención de la visita del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, este verano.

La monarca, quien en esta ocasión estuvo acompañada de su hijo el príncipe Carlos debido a que su esposo Felipe está hospitalizado desde anoche, acudió al parlamento en un auto, en lugar del tradicional carruaje dorado escoltado por la caballería real.

Durante su aparición en el parlamento, la monarca no portó la corona imperial ni la gran capa de terciopelo rojo que se acostumbra en esta solemne ceremonia de Estado.

Por primera vez la apertura de sesiones en el parlamento se pospuso dos días debido a las iniciaciones del "Brexit" en Bruselas y para dar tiempo a los conservadores de conseguir el apoyo del Partido Democrático Unionista (DUP) de Irlanda del Norte para apoyar su programa de gobierno.

Sin embargo, la primera ministra, Theresa May, llegó a la apertura oficial del periodo legislativo sin haber cerrado un acuerdo con los unionistas norirlandeses. Los conservadores perdieron en los comicios anticipados la mayoría que lograron en 2015, al obtener únicamente 318 de los 326 que requerían para contar con una mayoría absoluta.

Ataviada con traje azul celeste y sombrero del mismo color, la reina abandonó el Palacio Legislativo junto al príncipe Carlos para asistir más tarde a las tradicionales carreras de caballos Royal Ascot, uno de los eventos más esperados del año.

La reina realizó su deber constitucional en medio de un “ambiente sombrío nacional”, tal y como lo recordó en su mensaje oficial de cumpleaños el pasado sábado, tras cuatro ataques terroristas y el incendio de una torre de departamentos.