Tigres y su brinco a la grandeza en la Liga MX

Era 2011 y Tigres presumía en su escudo sus dos campeonatos de Liga de las temporadas 77-78 y 81-82, cuando aún existían los torneos largos; el equipo felino estaba empatado en el ranking junto con Puebla, Zacatepec y Veracruz con dos estrellas y era catalogado como un equipo más dentro de la competencia.

El equipo universitario debía de voltear hacia arriba para encontrar a los Rayados de Monterrey con cuatro títulos y qué decir de los cuatro grandes Guadalajara (11), América (10), Cruz Azul (8) y Pumas (7).

Sin embargo, el título del Apertura 2011 significó el comienzo de una nueva mística y filosofía para el club, el tercer campeonato volvió a poner a Tigres en el mapa y los resultados deportivos se fueron reflejando con trofeos casi de manera anual.

Indudablemente un cambio clave para que se diera la cosecha de más campeonatos fue la incorporación de elementos que conformaron una columna vertebral, primero con Guido Pizarro que llegó en 2013 y después su compatriota, Nahuel Guzmán, en 2014, su llegada al entonces equipo de Ricardo Ferretti ayudó a estructurar mejor una defensa que tenía a Hugo Ayala y Juninho.

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Pero la llegada más significativa fue la de André-Pierre Gignac en 2015, sus goles han representado la posibilidad de estar en fases finales e incluso se han reflejado en campeonatos, junto a él también se destaca la llegada de Javier Aquino quien desde entonces ha rendido hasta la fecha.

Regresando al presente, el cambio ha sido notable para la U de Nuevo León, sus siete títulos ligueros lo ponen en la clasificación empatado con Pachuca y Pumas y sólo por detrás de León (8), Cruz Azul (9), Toluca (10), Chivas (12) y América (13).

La final del Clausura 2023 significará un cambio significante para el ranking, ya que en caso de que Tigres gane su octavo campeonato estaría empatando al León, rebasando por primera vez a uno de los populares como Pumas, así como al equipo más longevo como Pachuca.

Pero en Guadalajara, también está el interés de sumar un trofeo más a sus vitrinas, pues les valdría para empatar la cifra histórica de las Águilas del América con trece campeonatos, que los mantiene como los máximos ganadores en todo el futbol mexicano.

Tal ha sido el contraste de 2011 a la fecha, que por estética, el club ha decidido omitir las estrellas en su escudo para poder tener un diseño limpio y sencillo, así como lo han adoptado los de Coapa y las Chivas.

A nivel nacional poco a poco se le ha incluido a los felinos a la conversación a cerca de la grandeza de los equipos y la repercusión de sus éxitos ha provocado la aparición de aficionados alrededor de la República Mexicana que se ha visto atraída por todo lo que engloba la institución.

Y aunque estén los reacios a creer que Tigres puede ser un equipo grande, lo que es indudable es que se ha vuelto un equipo ganador y constante en el balompié mexicano y que le ha permitido estar compitiendo contra los históricos.

​MN