Alcohol y volante

Siempre se ha dicho que el alcohol no se lleva con el volante, por lo que las autoridades tanto municipales como estatales están preocupadas, ya que el excesivo consumo de bebidas etílicas ha provocado accidentes viales, muchos de ellos de fatales consecuencias.

Pese a que la pandemia por el covid-19 continúa presente, los sitios en donde venden bebidas alcohólicas están llenos, principalmente de jóvenes y de algunos no tan jóvenes, quienes se pasan largo tiempo tomándolas acompañados de amigos.

Todo está bien hasta ahí, pero lo malo viene después, ya que esos mismos que han ingerido alcohol en grandes cantidades, se suben a sus vehículos y se convierten en un verdadero peligro, ya que bajos los efectos del alcohol pierden en muchas ocasiones la noción de lo que hacen, por lo que provocan percances viales en donde ponen en peligro sus vidas y las de terceros.

En Gómez Palacio siguen los operativos antialcohol, los cuales han dado resultados positivos, mientras que en Torreón, tiene una semana que regresaron los alcoholímetros, mismos que dejaron a varios conductores ebrios detenidos, quienes tuvieron que pasar un largo rato en la ergástula en espera del agente del Ministerio Público para que les apliqucara las multas correspondientes, además, posteriormente tienen que ir al corralón y recuperar sus vehículos por varios cientos de pesos.

Para Luis Morales, quien es el coordinador de Control de Padrones de la Secretaría de Finanzas, se está trabajando con un programa llamado "Servicio Responsable", el cual se implementó desde 2019, año en que los accidentes viales se dispararon.

Este consiste en capacitar a meseros, garroteros, barmans, gerentes y guardias de seguridad, para que tengan la capacidad, como lo marca la ley, de detectar y poder invitar a los comensales que se puedan encontrar en estado inconveniente, a utilizar un servicio de transporte alternativo.

Esto de los operativos antialcohol es como jugar al gato y el ratón, ya que mientras las autoridades los colocan, los conductores, principalmente los jóvenes, se están avisando por teléfono el lugar de la ubicación, para que eviten pasar por los operativos, sin pensar en las consecuencias. Hay que tomar conciencia, esperando que ya no paguen justos por pecadores.

walter.juarez@milenio.com