Hermanas laguneras piden ayuda para salir adelante; han vendido parte de sus bienes

Torreón. Los alimentos como carné y huevo en la mesa de doña Belén y su hermana, son un lujo que aprendieron a valorar con la llegada de la pandemia, tiempo en el que se vino abajo su pequeño negocio de venta de dulces en escuelas, por tal motivo dicen "no estar viviendo, sino sobreviviendo”, pues tuvieron que vender sus bienes para poder pasar esta racha.

Este 2020, se cumplieron 18 años en los que Doña Belén, tiene sin poder ver, pues durante una operación de cataratas, supuestamente una negligencia médica, le arrebato este sentido, que ya no pudo atenderse por su situación económica.

Por estos motivos Doña Belén, anhela pronto poder regresar a trabajar, pero para ello necesita recuperar su triciclo que está empeñado, por lo que solicita de la ayuda de los laguneros para salir adelante de esta situación.