Mal olor y aguas negras 'atormentan' a vecinos desde hace 5 años

El problema de desbordamiento de aguas negras en el Fraccionamiento La Amistad tiene más de cinco años y de acuerdo con vecinas del sector, éste se agudizó tras las pasadas lluvias dejando los accesos principales intransitables. 

Aunque el sábado pasado los trabajadores del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas), colocaron nuevas alcantarillas por el Paseo de la Nogalera, las mujeres dijeron que se limitaron a saludarlas con la mano, cuando la inundación en el sitio ya obligó a algunos vecinos a vender sus propiedades en tanto que otros deben resistir ante la imposibilidad de movilizarse. 

Es el caso de Jazmín Ramírez quien apuntó por El Paseo de la Nogalera, fueron colocadas nuevas alcantarillas cuando es por la calzada Paseo de la Concha donde permanece una laguna oxidada de aguas negras que representa un enorme foco de infección y además, le resta plusvalía a las propiedades que ahora se traspasan en remate ante la negligencia de las autoridades que no hacen nada por cambiar esta condición. 

Vecinos lamentan que por las noches deben cerrar todas las ventanas para no ser invadidos por el mal olor. (Lilia Ovalle)

Y aunque les han dicho que el drenaje se colapsa ante las enormes cantidades de basura que la población arroja a las alcantarillas, lo cierto es que los desarrolladores de vivienda continúan fraccionando los terrenos y la densidad poblacional se incrementa aceleradamente en el sector, demandando más servicios que rápidamente resultan insuficientes. 

“Este problema es bien viejo, como desde hace 5 años, aunque se agudizó este año cuando pasaron las lluvias, los del Simas nomás pasan y nos dicen adiós con la mano pero mire como esta la entrada inundada de agua negra. El olor es tan fuerte que de noche debemos cerrar los balcones porque se vuelve insoportable". 

“Muchos vecinos andan intentando vender y los que no podemos nos tenemos que aguantar, porque vemos que se han ido y aunque a nosotros ya nos gusta vivir aquí pues ya no hay de otra”.

PROBLEMA A LA VISTA

No se trata de una falla oculta como dicen los fraccionadores. La enorme laguna de aguas verdosas impide el paso vehicular. Y aunque vecinos afirman que jamás han tenido pavimento, el personal de servicios públicos se limita a echar caliche y piedrilla, en tanto que la laguna de aguas de drenaje ya forma parte del paisaje. 

Rosa Andrade llegó al Fraccionamiento La Amistad dos años atrás. Dice que el olor es algo que afecta hasta la salud emocional pues encoleriza la falta de atención de las autoridades pues llenan de tierras la calle y aunque no se sepulta el problema, pero piensan que con eso es suficiente. 

“Ayer vinieron a arreglar pero en la calle que está al lado. Han venido hasta Ciudad Nazas a quitar los charcos de drenaje que se hacen en el bulevar La Libertad, pero acá nada. Hacemos reportes y ya nadie hace caso aunque huele más a aguas negras y es más grande la peste”, concluyó.