Pequeña vive los desafíos de la educación sin acceso a la tecnología

Elizabeth Hernández tiene 10 años y a su corta edad ya sabe que debido a la pandemia por covid-19 no puede asistir a clases de manera presencial, pero también sabe que ni su familia ni ella tienen acceso a la tecnología, trabaja para comer, anhela seguir estudiando para enseñar a su mamá a leer, y no dejar la escuela porque doctora quiere ser.

Según datos de la Secretaría de Educación de Guanajuato  hay 1 millón 708 mil 370 estudiantes de todos los niveles que este lunes dieron inicio al nuevo ciclo escolar, excepto Jessica y sus primas que a falta de herramientas tecnológicas, no pudieron tomar sus primeras clases.

Elizabeth y sus tres primos no tuvieron un regreso a clases a distancia, son vecinos de la colonia Rizos de Saucillo, donde la mayoría cursa grados más arriba que ella, por lo que es más complicado coincidir con alguno que les pueda proporcionar los apuntes.

"Estoy trabajando haciendo mandados, porque tengo que tener dinero para comer, ayudo a mis papás. Gano a veces 5 pesos o a veces 4 pesos y los voy guardando para comprar algo para comer, a veces mi hermano pide pan porque él come de todo", relató. 

Agregó que el no haber tenido un regreso como el resto de sus compañeros, le provoca tristeza, mientras exhortó a la comunidad "Que me ayudaran con algo, con algo de mi hermano, para mi escuela pediría una mochila, unos colores, lápices, una cartuchera, una lonchera, todo lo que necesite para la escuela, todos los útiles".

Por lo pronto  la pequeña Elizabeth, ahora juega un rato con su hermano de 2 años y sus primos al no poder integrarse a la nueva forma del regreso a clases.

Si usted desea ayudar a esta pequeña a retornar sus clases y que cuente con los medios para seguir estudiando, puede comunicarse a los teléfonos 2 67 2200 o 4773018633.