Tras fallecimiento de Santi, sus padres han pasado por adversidades 

Así, entre aplausos el pequeño santiago carmona, de 9 años, era dado de alta tras vencer al Covid-19, esto además de padecer leucemia y encontrarse en tratamiento químico.

Haber vencido al virus, dio un respiro a toda la familia e impulsó los deseos de vencer al cáncer. Santi volvió a casa e inició su preparación para el trasplante de médula, pero 15 días después comenzaron los sangrados internos.

Su leucemia evolucionó a un nivel más agresivo, los medicamentos afectaron más su cuerpo y el 14 de septiembre el tratamiento cambió de curativo a paliativo.

Los ánimos de Santi no recayeron jamás, su único deseo era curarse y no tener que pisar otro hospital; pero su cuerpo de 9 años no resistió más. El 28 de septiembre sufrió otra hemorragia y pese a contar con tratamientos invasivos para mantenerlos con vida, sus padres decidieron ya no prolongar su agonía.

Lo peor es que tras la muerte del pequeño no terminaron los embates hacia la familia. Personal del hospital retuvo el cuerpo del menor por más de 7 horas y en el panteón donde descansaría, no se lo permitieron por la falta un título de propiedad.

Santi se adelantó en el camino pero dejó dos últimos deseos: descansar junto a su hermano mayor y su abuelo; pero le fue arrebatado por Felipe Garrido del panteón español, en Ciudad de México, quien además del atropello moral, intentó extorsionarlos.

El segundo deseo de Santi era despedirse y agradecer a todo el personal médico que vio por su estado de salud.

Finalmente, Diana y Juan Carlos tienen una idea para canalizar toda la experiencia y el dolor sentidos durante toda la batalla de Santi: realizar una fundación que ayude a más niños y sus familias, para hacer más liviana su lucha.

En Telediario Puebla Santi se ganó un lugar en nuestros corazones y también buscaremos replicar y transmitir a nuestra audiencia sus ganas por vivir.

CON INFORMACIÓN DE DAVID ALVÍDREZ / TELEDIARIO PUEBLA