"Hecho para México": Cártel de Sinaloa domina el mercado de los vapeadores en Culiacán
El cártel de El Chapo amenazó, se apoderó y monopolizó el mercado de los vapeadores en Culiacán, Sinaloa, en medio su guerra interna con 'La Mayiza'.
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El Cártel Jalisco Nueva Generación controla de la venta de vapeadores en Guadalajara / Cuartoscuro
El cártel de Sinaloa obliga a comerciantes a vender sus vapeadores en Culiacán, personalizados, fabricados en china y con la leyenda Hecho para México, son la única opción para quienes buscan este producto en la región..
Al día de hoy, se cuentan por decenas los dispensarios que han sido incinerados, baleados o atacados en estos últimos tres meses, muchos de ellos disfrazados de smoke shops o estéticas, y presumiblemente atacados a manos del cártel de La Mayiza para cortar el flujo financiero de sus rivales.
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La venta de Vapeadores en Culiacán está controlada por el Cártel de Sinaloa
Los vapeadores que venden en Culiacán, de todos sabores, tanto de tabaco como de marihuana, la mayoría fabricados en China, son distribuidos y controlados por el cártel de Sinaloa, específicamente por el grupo de Los Chapitos quienes obligan a los comerciantes a dejar el negocio o a ser amenazados.
"Vendes mi producto… o no vendes nada".
Comerciantes accedieron a conversar con TELEDIARIO sobre la dinámica de este negocio que, de manera particular, se ha apoderado La Chapiza en la zona urbana de Culiacán desde hace por lo menos un año.
“Todo eso fue cuando el narco, a principios de este año, el cártel de El Chapo, fue el que agarró y dijo: ‘¿saben qué? Este mercado ahora es mío’. Se puso en toda la ciudad de Culiacán, una por una, a ponerle levantones a comerciantes, y también por la buena, si no te ponías pendejo, pues nada más te mandaban a sus sicarios con metralleta a quitarte las cosas”, explica una de las fuentes consultadas.
¿Que marcas de vapeadores vende el Cártel de Sinaloa en Culiacán?
Se trata de un vapeador que ya circula en las calles Sinaloenses es el dispositivo iJoy Bar IC8000, de fabricación china. Es un desechable de 8 mil fumadas. Tiene una pantalla para ver el nivel de carga, utiliza un cable Tipo y es de sabor Fresa-Sandía.
“Lo que hizo el Cártel fue contratar a Ijoy… se lo fabricó en serie al Cártel, le puso la bandera de México y dice ‘hecho para México’. Así pueden identificar que compres el que el cártel te vende.
Miembros del cártel se encargaron de ir de negocio en negocio a imponer un precio de compra y venta, una cantidad y zonas donde esta permitida su distribución.
“Empezaron a decir: ‘güey, si quieres vender, te va a costar 250 pesos pero yo te digo cuántos tienes que comprar y dónde los tienes que vender’”.
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Pero la organización criminal no solo estaría acaparando el negocio del vape de tabaco, sino también los dispositivos estadunidenses que contienen Tetrahidrocannabinol (THC), sustancia que contiene la marihuana y es responsable de sus efectos psicoactivos.
“Haz de cuenta que es un desechable cualquiera, pero en lugar de tener nicotina, tiene THC. Es la misma fórmula: propilenglicol, glicerina, pero en vez de nicotina tiene THC”, advierte otro proveedor.
Se trata de los vapeadores estadounidenses BackpackBoyz, que en Hollywood se pueden adquirir con más facilidad que una cerveza. Una marca que se puede ver con facilidad en estos sitios, y que ya cuenta con su propio narcocorrido:
“Y aparte mis pulmones ya los hice de acero. De tanto estar quemando rama, hice un catador. Hoy soy el mejor del mercado hasta el día de hoy. Ya son varios los dispensarios que hay en la región San Diego, la donde empezamos…”, dice la canción Backpack, de Arturo Villa Araujo, producida por Jimmy Humilde.
El negocio de los vapeadores controlado por grupos del narcotráfico se ha extendido por entidades como Jalisco o Michoacán, de la mano de otras organizaciones criminales, como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
“Y también Michoacán. Tenía muy buen cliente que quería bastante pero vivía en un pueblo, y literal me llamó: ‘Güey, acaban de venir los narcos del Cártel de Jalisco y se llevaron todo por la buena, mamona, por la buena… no me golpearon, pero se llevaron todo mi negocio’”, confía.
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