Se observa de todo

CHOQUES, VOLCADURAS, GOLPIZAS Y ASALTOS.- Se empezó a hablar mucho de las riñas que han aparecido por todos lados, en diferentes sectores de la región lagunera, así como afuera de antros, centros comerciales y no se diga en comunidades ejidales, en donde los “rancholos” siguen haciendo de las suyas. 

Pero ahora realmente no se sabe qué es lo que está pasando principalmente en Torreón, luego de que la madrugada del martes se suscitara un accidente vial en el que participó una conductora de una camioneta BMW que presuntamente manejaba en estado de ebriedad. 

En este percance murió un hombre que viajaba de su pasajero y que tras impactar la camioneta otro vehículo, este salió proyectado por el quemacocos y falleció aplastado, mientras que la BMW se proyectó hacia dos vehículos estacionados. 

Lo que llama la atención es que este accidente en el que la mujer de 44 años chocó su camioneta, se suscitó en la madrugada en el cruce de Ramón Corona y Abasolo, en pleno centro de la ciudad y con ella además del hombre de 31 años que perdió la vida, viajaban varias personas, entre ellas sus hijas. 

Es difícil pensar que la señora presuntamente alcoholizada participara en el choque-volcadura, mientras que el que ella señala como responsable se diera a la fuga. Pero no solamente es este accidente, también una mujer fue víctima de acoso sexual cuando caminaba por calles de la colonia Rincón La Merced, en Torreón y por fortuna, una patrulla logró detener al agresor, quien descendió de un auto Chevy y le mostró sus partes íntimas.

 Las agresiones no paran y una mujer que salió de su hogar para dirigirse a la casa de sus suegros que se encuentra cerca de su vivienda en el sector Rincón San Alberto, en Gómez Palacio, fue sorprendida por varios sujetos. 

En otra de taxistas y para no creer, un chofer fue detenido por agentes de Tránsito de Torreón, quienes lo vieron conducir de manera errática y a exceso de velocidad, por lo que al revisarlo detectaron que viajaba en completo estado de ebriedad sobre la avenida Bravo, evitando su aprehensión un posible accidente de fatales consecuencias, ya que no viajaba solo, lo hacía acompañado de su esposa embarazada y sus dos pequeñas hijas. 

Se está viviendo una temporada en la cual se está viviendo de todo, pleitos callejeros, choques, volcaduras, atropellamientos y asaltos.

Walter.juarez@milenio.com