Compañeros le regalan moto a joven para que pudiera trabajar; recorría largos tramos en bicicleta vieja
El muchacho de nombre Laureano estaba pasando por una situación económica difícil junto a su familia.
Las historias que nos encontramos en internet de servicio, solidaridad y ayuda al prójimo nos hace tener esperanzas en la humanidad, y es que hoy en día quien haga un gesto de bondad por otro es sumamente valioso, debido al panorama de violencia que constantemente se vive.
A continuación te presentamos la historia conmovedora de un joven llamado Laureano, quien tiene 17 años y vive en Tucumán, Argentina, junto a su familia, a quienes procura debido a problemas económicos por los que han tenido que pasar.
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Actualmente, Laureano trabaja para una reconocida empresa de delivery para ayudar a su mamá y su hermanito, ya que no están pasando por una buena situación.
Y es que para poder trabajar, el adolescente tenía que recorrer 17 kilómetros diarios en una bicicleta vieja, lo cual le hacía muy difícil poder desenvolverse a plenitud en sus labores.
Por tanto, al ver la situación que atravesaba diariamente Laureano, sus compañeros se organizaron para ayudarlo y recaudaron dinero para regalarle un celular y, con ayuda de un colaborador anónimo, le consiguieron una moto para que pudiera trabajar mejor y se pudiera deshacer de esa bicicleta que ya no le servía para trabajar.
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El propósito fue reunir la mayor cantidad de dinero posible para adquirir su nueva herramienta de trabajo por lo que dijo haberse sorprendido por tal acción de sus compañeros.
“Venía trabajando desde el centro hasta Yerba Buena, que son poco más de 5 kilómetros, hasta que unos changos me empezaron a hablar, me juntaron plata para que comprara una moto, y con un donador, la juntaron”, dijo el joven, emocionado.
La bicicleta de Laureano estaba en malas condiciones y se le dificultaba mucho poder moverse tranquilamente. Además, le resultaba muy complicado recorrer tantos kilómetros bajo el sol y en otros en días bajo la lluvia.
“Agradezco mucho a la persona anónima que me compró la moto, que permitió que mis compañeros me compren el celular. Mi familia está muy contenta. Trabajo para ayudar, para que no falte nada. Mi sueño es terminar la escuela y ser policía”, señaló.
Luciano Díaz y sus compañeros de trabajo hicieron un llamado a la solidaridad para ayudar a salir adelante a los compañeros de trabajo y amigos.
JVS
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