La respuesta de un comerciante fue decirle que no porque no quieren problemas con el INM, ya que saben que la estancia de los caribeños en Tamaulipas no es legal.
Al llegar al lugar para que militares hicieran la revisión de rutina, los conductores se dieron a la fuga, y procedieron a abrir los contenedores que llevaban 800 migrantes de origen centroamericano.
El titular de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos de la Segob, reconoció que han detectado documentación falsa entre los migrantes.
El padre Felipe de Jesús Sánchez Gallegos, de la parroquia María Goretti, muestra temor ante posible tráfico de personas, órganos y drogas: “Yo les pedí a ellos que me los trajeran a todos”, dijo