La situación obligó a las autoridades capitalinas a realizar un operativo y cerrar algunos de los puestos callejeros, así como invitar a la gente a respetar las medidas sanitarias correspondientes.
Un tradicional establecimiento de mariscos lució con gran afluencia de personas durante este jueves santo, hecho que a aliviado medianamente la venta de los locatarios.
Puestos de comida en la vía pública son a los que se acuden para un muestreo de salud, mismo que se mandan a un laboratorio especializado para su análisis.