El mapa, producido a partir de datos del satélite ALOS-2 de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial antes del sismo (31 de marzo) y después (23 de junio), muestra el desplazamiento de la superficie causado por el terremoto.
Mediante sus redes sociales, la agencia espacial abrió una convocatoria dirigida a personas de origen hispano o que dominen el idioma español para trabajar creando contenido audiovisual para misiones espaciales.
A través de un comunicado la NASA informó que el fenómeno es conocido como “llamarada solar”, sin embargo, el evento fue considerado como débil por lo que no requirió atención especial.