El hallazgo, que no se reveló hasta este miércoles, se produjo el pasado año, cuando el Instituto Flamenco del Mar (Vlaams Instituut voor de Zee, VLIZ) limpiaba el fondo submarino.
Hasta el 27 de enero de 2019, la tierra mágica de los pequeños seres azules cobra vida en Bruselas, la capital de Bélgica, país donde fueron creados en 1958 por las manos del diseñador Peyo.