Los peatones tienen que descender por las escaleras provisionales, que recientemente instalaron en el puente, para finalmente cruzar un carril por donde todavía pasan vehículos.
Esta iniciativa se debe a que la capital mexicana fue seleccionada, entre 70 metrópolis, para formar parte del programa Acelerador de Políticas, el cual busca salvaguardar la vida de los motociclistas.