La advertencia del director del organismo, Tedros Adhanom Ghebreyesus, llega después de calificar de "muy preocupante" el aumento súbito de nuevos casos en Italia, Corea del Sur e Irán.
Los enfermos están siendo atendidos en al menos cuatro ciudades diferentes, incluida la capital, Teherán, donde en algunas farmacias ya se agotaron las mascarillas y el desinfectante para manos.