Cuando el hombre se detuvo por necesidades fisiológicas, los policías escucharon ruidos y se percataron de los migrantes, quienes pidieron comida a las mismas autoridades.
Para el rescate de los perritos trabajaron en conjunto la Policía de Investigación, la Fiscalía de Investigación de Delitos Ambientales y la Fiscalía de la Ciudad de México.
"Se hizo contacto con las personas y se les brinda la atención con cobertores. Se contaba con una temperatura de -2°C", informó la corporación de rescate.