La Superintendencia de Industria y Comercio en Bogotá, Colombia, abrió una investigación contra la empresa por no tener un canal de peticiones, quejas y reclamos, así como la confusión de sus términos y condiciones con los comercios.
A través de un comunicado, Rappi señaló que el repartidor fue desactivado de la plataforma debido a que estas acciones fueron una clara violación a los términos y condiciones.
La “Asociación Ni Un Repartidor Menos” en conjunto con la alcaldía Miguel Hidalgo llevaron a cabo un taller sobre el acosos sexual, debido al incremento de casos que se han presentado en las repartidoras de las aplicaciones como Uber Eats y Rappi.
