Una vez al año México se pinta de color amarillo-anaranjado, pues los pobladores se alistan para recibir a sus muertos y en sus altares resalta la flor de cempasúchil, para guiar a nuestros ancestros a casa.
En el altar formaron palabras y frases como "Justicia", "En Puebla la justicia está muerta" y "No estamos muertos, estamos desaparecidos"; todas elaboradas con flor de cempasúchil.
Cada año la flor de cempasúchil se vuelve parte de las ofrendas mexicanas en el Día de Muertos, por lo que te contamos su origen y dónde la producen en nuestro país.