En Gómez Palacio, inicia Cuaresma con imposición de ceniza
La Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe, durante la primera celebración eucarística de este Miércoles de Ceniza, se encontraba en alrededor del 80 por ciento de su capacidad.
El Miércoles de Ceniza es un tiempo privilegiado para que los católicos a través de la oración, la penitencia y el ayuno puedan suscitar en sus corazones el tiempo de reconciliación entre los hermanos para procurar la paz, no solamente interior sino también en la sociedad, expresó el obispo de la Diócesis de Gómez Palacio Jorge Estrada Solorzano.
Este miércoles 22 de febrero, el obispo desde temprano inició con la bendición de la ceniza para dar paso a la primera celebración eucarística del día en la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe de Gómez Palacio, y al finalizar, llevar a cabo la imposición, en esta ocasión y como se había durante los tiempos de la pandemia por el SARS-CoV-2 responsable de la covid-19, se llevó a cabo en la cabeza.
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En la Catedral de Gómez Palacio, la primera misa se realizó a la 8:00 de la mañana, y continuaban a las 12:00 del mediodía y por último a las 7:00 de la tarde, mientras que durante el transcurso, se iba a estar colocando la ceniza.
"Es la preparación para celebrar con alegría la resurrección", agregó.
La Diócesis de Gómez Palacio, inicia la Cuaresma del 2023, con un proceso de reacomodo interno, con las asignaciones de nuevos párrocos en 16 Iglesias y a quienes el Obispo ya ha hecho las tomas de posición.
De igual forma señaló que iniciarán con un proceso de fortalecimiento del camino de la misión permanente.
"Ya lo veníamos haciendo, pero queremos ahora intensificarlo más, y como fruto del sínodo y encuentro eclesial, pues respondiendo a todas esas voces que escuchamos, vamos a iniciar por ese camino de formar pequeñas unidades en todas las parroquias".
Estás pequeñas comunidades estarán enfocadas en hacer oración, a estudiar la palabra de Dios, la vida así como también a fortalecer su pertenencia a la iglesia.
La Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe, durante la primera celebración eucarística de este Miércoles de Ceniza, se encontraba en alrededor del 80 por ciento de su capacidad, y aunque no era obligatorio, la mayoría de los presentes portaba su cubrebocas, como medida de protección, hábito que dejó la covid-19.
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