Padre de Alondra, mujer asesinada junto a su madre en Poncitlán, recibe supuestas amenazas por parte del agresor

Saúl Franco González, padre de Alondra Viviana Franco Tinoco y esposo de Liliana Tovar, mujeres que fueron asesinadas a balazos por un hombre en Poncitlán, el 31 de enero, mencionó que teme por su vida y por la de su familia, ya que han recibido presuntas amenazas del agresor.

“Ya habían sido muchas veces, yo me la llevaba a la casa, y este hombre la tenía muy amenazada, con hacernos algo a mí o a mi hijo, por eso mi hija no hacía nada. Pues todo el tiempo vivimos muy preocupados por ella, los dos, tanto como ella como yo, todo el tiempo vivimos con angustia”, explicó Saúl.

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El padre de Alondra exhortó a las personas de Poncitlán a no quedarse calladas, aquellas mujeres que han sufrido violencia intrafamiliar, antes de que sea tarde y suceda algo como lo que le pasó a su hija.

“Más que nada es, pues yo las invitaría a que no se queden calladas, hay mucha gente que nos escucha, y este… pues que lo hagan a tiempo, que no pase los que nos pasó a nosotros”, declaró el padre de Alondra.

La familia Franco Tinoco estaba al tanto del maltrato físico y psicológico que el hombre ejercía en contra de su hija, y habían intentado hablar con ella para que interpusiera una denuncia por la violencia de género que sufría, pero ella tenía miedo de hacerlo debido a las represalias que habría en su contra.

Una vez que Alondra decidió dejar su miedo atrás e interponer una denuncia en contra de su agresor, éste llegó al Ministerio Público de Poncitlán, donde ella y su madre Liliana, de 46 años, estaban realizando la denuncia, e inmediatamente disparó con arma de fuego en contra de ambas.

Liliana falleció al instante debido a la gravedad de la herida de bala, mientras que Alondra fue trasladada a un hospital para recibir atención médica, no obstante, no logró sobrevivir y poco después murió, y dejó a dos hijos huérfanos: un bebé de un año con cuatro meses y a otro de siete años.

Hasta el momento, el Ministerio Público de Poncitlán no cuenta con elementos de seguridad, tal como sucedía el 31 de enero, cuando únicamente se contaba con la presencia de burócratas, quienes no podían responder a la agresión del hombre.

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En el lugar de los hechos solamente hay una patrulla de la Unidad Especializada Policial de Atención a Mujeres Víctimas de Violencia. Sin embargo, las mujeres habitantes de Poncitlán aseguraron que en ningún lado se sienten seguras.

Se espera que la Fiscalía de Jalisco lleve a cabo las diligencias correspondientes para atrapar al responsable de este homicidio doble.

AA