Sergio Pérez se llevó ovaciones en el Show Run
Pasaron 11 años para su regreso y Sergio Pérez lo hizo en plan grande.
El piloto tapatío fue el protagonista del Red Bull ShowRun en la zona de La Minerva, su extraordinaria temporada en la Fórmula 1 generó alta expectación en la afición mexicana, pues además de los jaliscienses, seguidores de otros estados arribaron a ver el show.
Alrededor de las 11:30 am empezó el rugido del RB7 Checo Pérez, el auto fue el mismo con el que Sebastian Vettel ganó el campeonato de constructores y de pilotos.
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En el circuito de tres kilómetros de distancia, se congregaron 130 mil personas, según cifras del gobierno del estado.
“Más de 100 mil personas y muchas que se vinieron a acampar desde anoche, está espectacular, un gran ánimo y estamos muy orgullosos de ti”, fueron las palabras del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, al piloto.
Desde la madrugada del martes los aficionados llegaron a acampar a la zona, no todos los días se tiene un auto de Fórmula 1 por unas de las principales avenidas de la ciudad.
“Después de tantos años, es mi casa. El apoyo que recibo aquí es inigualable, sin duda es uno de los días más especiales de mi carrera”, dijo Pérez a Claro Sports.
“Gracias a toda la gente que estuvo formada desde ayer a la 2 de la mañana, ha sido increíble y espero que se quede en el corazón de todos los jaliscienses para siempre”.
La segunda y tercera vuelta fueron más largas, el piloto pisó a fondo el acelerador en las rectas de Avenida Vallarta y en las curvas hizo trompos, mismos por los que fue ovacionado por los presentes.
El olor a llanta quemada, el sonido del motor y la velocidad, fueron aspectos únicos que dejó la experiencia del Show Run.
Al cierre del evento, un niño burló a la seguridad y corrió hacia Checo en busca de un autógrafo y una foto, los guardias lo detuvieron, pero el tapatío permitió que estuviera de cerca y le concedió el deseo anhelado.
El piloto tapatío fue el protagonista del Red Bull ShowRun en la zona de La Minerva, su extraordinaria temporada en la Fórmula 1 generó alta expectación en la afición mexicana, pues además de los jaliscienses, seguidores de otros estados arribaron a ver el show.
Alrededor de las 11:30 am empezó el rugido del RB7 Checo Pérez, el auto fue el mismo con el que Sebastian Vettel ganó el campeonato de constructores y de pilotos.
En el circuito de tres kilómetros de distancia, se congregaron 130 mil personas, según cifras del gobierno del Estado.
“Más de 100 mil personas y muchas que se vinieron a acampar desde anoche, está espectacular, un gran ánimo y estamos muy orgullosos de ti”, fueron las palabras del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, al piloto.
Desde la madrugada del martes los aficionados llegaron a acampar a la zona, no todos los días se tiene un auto de Fórmula 1 por unas de las principales avenidas de la ciudad.
“Después de tantos años, es mi casa. El apoyo que recibo aquí es inigualable, sin duda es uno de los días más especiales de mi carrera”, dijo Pérez a Claro Sports.
“Gracias a toda la gente que estuvo formada desde ayer a la 2 de la mañana, ha sido increíble y espero que se quede en el corazón de todos los jaliscienses para siempre”.
La segunda y tercera vuelta fueron más largas, el piloto pisó a fondo el acelerador en las rectas de Avenida Vallarta y en las curvas hizo trompos, mismos por los que fue ovacionado por los presentes.
El olor a llanta quemada, el sonido del motor y la velocidad, fueron aspectos únicos que dejó la experiencia del Show Run.
Al cierre del evento, un niño burló a la seguridad y corrió hacia Checo en busca de un autógrafo y una foto, los guardias lo detuvieron, pero el tapatío permitió que estuviera de cerca y le concedió el deseo anhelado.
MP
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