La Laguna festejó con euforia el pase a la final

"De verde se pintó el futbol, euforia, festejo y gozo", recita uno de los añejos himnos de Santos Laguna, palabras que relatan lo que se vivió la noche de este domingo en las calles, avenidas y plazas de la ciudad de Torreón, donde miles de aficionados salieron a festejar el pase del equipo albiverde a la final, donde se topará con Cruz Azul.

"Banderas de Verde y Blanco ondearon por La Laguna y los claxons parecieron cantar en coro", recita otra parte de ese mítico himno.

Apenas se pitó el final del partido, los claxons sonaron por gran parte de La Laguna, en las esquinas de las colonias, en los bares, en los restaurantes, pero sobre todo en el punto de reunión de la afición albiverde, la Plaza Mayor, donde miles celebraron hasta pasada la media noche.

Olvidando que se está en plena pandemia, primer empezó el festejo con unos cientos de aficionados, pasadas las 10 de la noche se fueron sumando aficionados, familias parejas, grandes, niños y personas de la tercera edad, esto era una festividad impresionante.

Ondeando sus banderas, cientos de aficionados llegaban a la Plaza Mayor para unirse al festejo, los automovilistas como siempre, son a los que les tocó bailar con la más fea, pues lejos de celebrar con ellos, se suben a sus toldos y los abollan con el pretexto de festejar, por supuesto no faltó su clásico baño de espuma, cerveza y otros líquidos de dudosa procedencia.

El tache, sin duda fue la lluvia de latas, el intercambio de proyectiles en medio del festejo, niños y mujeres buscaban resguardo, los automovilistas, salir lo más pronto posible de del área que de verde y blanco, por momentos se pintó de rojo.

Al final, los rijosos hicieron las pases y siguieron el festejo, saltando, gritando y cantando en las escaleras a las afueras de la presidencia municipal.

La Laguna estuvo de fiesta hasta pasada la media noche, se celebra el pase a una final más, una algarabía que no se veía desde 2018, cuando fue el último campeonato del equipo lagunero.