“Si no hay cuerpo no hay delito”: Laura Zapata relata cómo fue el día que la secuestraron

Recientemente Laura Zapata fue entrevistada por Yordi Rosado para su canal de YouTube, en donde tocó temas importantes como el secuestro del que fue víctima junto a su hermana Ernestina Sodi.

De acuerdo con la actriz, los hechos ocurrieron el 22 de septiembre de 2002 cuando se encontraba en el Teatro San Rafael, llevando a cabo la puesta en escena “La Casa de Bernarda”.

Destacó que su hermana fue invitada a ver la función por casualidad, debido a que le ofrecieron el boleto de otra persona que no había podido asistir.

Al terminar el evento decidieron salir a cenar en el auto de Laura. Al dar vuelta por una avenida, se encontraron con un camión recolector de basura que les impidió el paso.

Por lo que decidieron evadir el auto, sin embargo, más adelante fueron cercadas por varios automóviles. De una camioneta descendió un hombre con un arma larga.

"Con la culata de lo que fuera, rompe mi vidrio", dijo.

La actriz abrió la puerta del auto e intento escapar del lugar, pero fue detenida por uno de los hampones que la colocó en el asiento del conductor.

"Veo que ella se baja, pero también la agarran y la suben", dijo. Tras esto, a la Laura la bajaron del carro y la metieron en la cajuela de otro automóvil.

"Cuando me dijo "¿qué está haciendo Laurita? dije "en la madre"", agregó.

Añadió que fueron trasladas a una casa de seguridad, donde les era imposible salir. Cuando comenzó a gritar, uno de los criminales le exigió que se tranquilizara.

"Queremos el dinero de Tommy Mottola y queremos cinco millones", fue lo que dijo el secuestrador.

Además dijo que intentó decirle a los secuestradores que no había forma de negociar, pues no eran cercanas al productor casado con su hermana Thalía.

Destacó que los criminales fueron amables con ella y no dejaron que pasara hambre, aunque Ernestina comenzó a tener problemas para caminar y a ella le bajaron las defensas.

"A mí se me abrió la mollera", dijo.

Laura Zapata comentó que las cambiaron de casa cuando la policía realizó un operativo por los domicilios cercanos y añadió que los secuestradores tenían la posibilidad de asesinarlas.

"Hay que matarlas porque si no hay cuerpo no hay delito", fueron las palabras de los criminales, aseguró la actriz.

Explicó que las negociaciones sobre su rescate iniciaron desde el primer momento en que fueron secuestradas. Añadió que el primero en responder fue su hijo Claudio, quien en ese momento tenía 14 años de edad.

A 10 días del rapto, Laura fue liberada sin cobrar un solo peso. Sin embargo, añadió que le dio vergüenza haber salido sin su hermana Ernestina.

Añadió que le dio pavor el acudir con las autoridades, debido a que temía por la vida de su hermana y además había desarrollado síndrome de Estocolmo, por lo que pedía viajar en la cajuela del automóvil.

Finalmente, desde que fueron raptadas hasta que terminó el asunto pasaron 45 días. Desde que Laura salió de la casa de seguridad, aseguró posteriormente Ernestina, esta última fue golpeada, abusada sexualmente y agredida.

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